Gus mornins, 29/06/2020
"Algunas personas dicen que 'Casablanca' o 'Ciudadano
Kane'... Yo digo que 'Jasón y los argonautas' es la película más grande jamás
hecha",
(Tom Hanks, 1992)
Guuuus mornins, cinéfilos.
Joer, pues sí que empezamos fuertes la semana. Esta frase que
encabeza hoy nuestro gus no la dijo el bueno de Tom después de pasarse con el
chinchón ni después de que le diera un golpe de calor de primeros de verano. Ni
siquiera porque fuera una línea de diálogo de Forrest Gump. Hanks
pronunció estas palabras antes de entregar en 1992 un Oscar honorífico a
nuestro protagonista del gus de hoy, el productor y creador de efectos
especiales Ray Harryhausen.
Y es que antes de recordar que tal día como hoy perdimos a
gente tan importante en esto del cine como Katharine Hepburn o Vittorio
Gassman, permitidme que el gus de hoy vaya dedicado al centenario del nacimiento
de ese auténtico monstruo – nunca mejor dicho- del Séptimo Arte. Y bien pensado,
lo de Hanks a lo mejor no es ninguna “boutade” y tal vez el nombre de nuestro
homenajeado merezca tanta relevancia como la que tiene un Méliès, pongamos por
caso.
Como dijo George Lucas, sin Ray Harryhausen no hubiese
existido Star Wars. Tampoco hubiesen existido los dinosaurios de
Spielberg o las fantasías tolkianas de Peter Jackson. O tantas y tantas otras
películas que se lo deben todo a este auténtico pionero del cine. Harryhausen
tuvo a su vez sus propias referencias.
Las tres más importantes, El mundo perdido, la adaptación
de Conan Doyle, que vio por primera vez en un cine con cinco años, King Kong,
que le dejó impresionado con trece, y Fantasía que le llevó a desechar
un trabajo previo, The evolution of the Word que estaba pensando vender
a distintos centros educativos, al darse cuenta de que nunca sería capaz de
explicar la evolución de la especie humana con tanta perfección.
Son esas películas las que hacen del joven Ray un audaz “inventitos”
que experimenta en el jardín de su casa con figuras y maquetas para crear sus
propias ficciones. Sus padres, cinéfilos ambos, le animan en sus proyectos. Pero
no solo se fija en las películas, también en los grabadistas decimonónicos como
Doré cuyas obras anticipan la técnica de los dioramas.
En la década de los cincuenta, Harryhausen, que había nacido
y vivía en Los Ángeles conoce a Brian Willis, responsable de los efectos especiales
de El mundo perdido y King Kong, padre de la llamada “stop motion”,
una técnica que su joven admirador elevará a una categoría superior en el
futuro.
Otra de las influencias más notables en la trayectoria de
Harryhausen es el escritor de ciencia ficción Ray Bradbury a quien también
conoce en esta época. Pero el trabajo que le abre las puertas de la industria
es el cortometraje Cómo atravesar un barranco, que rueda con técnicas de stop
motion en 1941, antes de alistarse en el ejército y con claros fines
propagandísticos. Capra lo ve y lo ficha para hacer documentales en su
departamento de Servicios Especiales, entre ellos el famoso ¿Por qué
luchamos?
En los cincuenta, el reestreno de King Kong supone una oleada
de películas catastrofistas sobre monstruos y criaturas sobrenaturales usadas
como metáfora de la incipiente Guerra Fría. El talento de Harryhausen comienza
a hacerse notar en producciones como El monstruo de tiempos remotos o Sucedió
en el fondo del mar. La primera se basa en un relato de Bradbury y dará pie
al nacimiento del fenómeno Godzilla.
Harryhausen se prodiga en la ciencia ficción con La tierra
contra los platillos volantes o La bestia de otro planeta. Pero es
el cine de fantasías mitológicas el que le da la verdadera fama, títulos como
Simbad y la princesa o la ya mencionada Jason y los argonautas entre muchas
otras. La famosa escena dela batalla de los esqueletos en esta última dura
apenas cinco minutos, pero necesitó cuatro meses de duro trabajo. Aquí cobra
sentido la frase de Hanks.
Y entonces llega Hace un millón de años. Harryhausen siempre
bromeaba diciendo que por primera vez en sus películas sus criaturas ya no eran
las estrellas. Se refería a la irrupción del mito de Raquel Welch.
Su último trabajo destacable se produce con Furia de titanes
en 1981. A partir de entonces la industria deja de confiar en el y en sus
métodos que se han quedado algo desfasados tras la llegada de los nuevos
prodigios técnicos y jóvenes profesionales, que paradójicamente se deshacen en
elogios y parabienes hacia él.
Y así, George Lucas dice lo que dice, Spielberg es el primero
que lleva a Ray al set de Parque Jurásico para que vea los resultados – está convencido
que Michael Crichton se inspiró en sus películas para escribir su obra- y son
numerosos los guiños y los homenajes que se incluyen en los films más
taquilleros del nuevo Hollywood.
Harryhausen murió en 2013 con 92 años, pero su legado sigue
vivo a día de hoy y continuará por siempre creo yo. Uno de mis primeros recuerdos
cinematográficos de la infancia me remite a la proyección matinal un sábado en
los curas de Jasón y los argonautas, y eso me llena de nostalgia. Harryhasuen
trabajó una época en el que los efectos especiales estaban al servicio de las
películas y no al revés. Hoy es un buen día para recordar que la imaginación y
la fantasía nos trajeron hasta aquí, fueron la materia prima que un día hizo
que empezásemos a amar el cine.
Comentarios
Merecido gus.
Abrazos fotograma a fotograma.
Es, mas que curioso, impresionante de lo de Harryhausen: Ahora que han pasado décadas de sus maravillosas criaturas y que la informática ha conseguido autenticas maravillas que hacen que nos creamos a cualquier monstruo que devora con un realismo casi perfecto a un ser humano, seguimos viendo a esos esqueletos luchando contra un semidios y nos parece inigualable.
Como inigualable me parece el Viggo de "Una historia de violencia", para mi mejor papel que el de "Promesas del Este". Y si Schumacher es uno de los directores de los 80 que menos me gusta, justo es reconocerle algunas cosas que serán ya eternas para nuestra memoria de juventud y aunque el Brat Pack finalmente quedo en muy poco (solo Demi Moore por razones no cinematograficas sigue teniendo un cierto nivel de popularidad), casi todos los de "Linea mortal" (película que nunca me gustó demasiado pero a años luz del reciente remake con Ellen Page) si que tuvieron una carrera que merezca tomarse como tal. Coincido con el Lobo que "Tiempo de matar" es una película que merecería mas reconocimiento y que el plantel de actores es estupendo.
Y Storaro me parece un fuera de serie porque no fotografía, él pinta directamente. Y casi todas las películas que nombrabas fotografiadas por Vitorio son mucho más gracias a su magia.
De Fosse no puedo decir nada que no haya dicho ya y siempre me quedaré corto...su serpiente en "El principito" aun sigue maravillandonos a mi hija y a mi que de vez en cuando revemos en youtube con la boca abierta.
Grandes todos ellos y muchos son los momentos imprescindibles que nos han dejado en la pantalla. Y luego estáis vosotros, que también nos llegáis a través de una pantalla y que nos hacéis disfrutar con letras tanto como otros con imágenes.
Y al hilo de esto de las letras, una reflexión que comentaba con mi chica hace un par de días a propósito del nuevo número en papel de Fotogramas. Es posible que la revista no resista mucho más tiempo su edición en papel, somos muy pcoos los que seguimos comprándola, pero viendo su versión digital creo que la revista física sigue siendo imprescindible. Es posible que la versión web sea más ágil para la gente joven que mira el titular y disfruta de la anécdota, y muy pocos perderán el tiempo leyendo un largo reportaje o interesándose por alguna entrevista, pero para mi es absolutamente necesario seguir leyendo cosas sobre cine y no sólo curiosidades y cotilleos de medio minuto.
Por eso este sitio sigue siendo maravilloso, por que se lee y se aprende con vosotros. Mil gracias por un esfuerzo tan pobremente recompensado.
Abrazos de un entregado fan.