GOOD MORNING 6-4-2018


Si en el futuro hubiese una máquina que permitiese los viajes en el tiempo y se le preguntase a la gente ¿a qué época iríais?
Habría una señora con el pelo azul que diría: “Yo a principio del siglo XXI a la casa de una familia para explicarles que la mejor manera de limpiar es usando Lejia Neutrex” .
Esa mujer muy bien no tenía que estar muy bien

Manuel Burque (más o menos dicho así, en la radio)


Gussss morninsss cinéfilos nos de God.

Ahhh, los viajes en el tiempo, qué interesantes parecen ser. En general todos los viajes, pero no es lo mismo acercarte a Barcelona a ver la Sagrada Familia o a Sudáfrica a regalar gafas de sol a niños hambrientos que moverte al pasado para contemplar de cerca como escribía Cervantes “El Quijote” o como Pat Garret se cargó a Billy el Niño. Y claro en esto de los viajes hay dos tipos diferenciados: el turista y el viajero. El primero, como yo mismo, es el que ve lo que le dicen que hay que ver, come donde cree que puede comer (en función del presupuesto, las más de las veces) y es un observador distante (más o menos). El viajero se lo toma con más calma, se entremezcla con los paisanos, intenta vivir con y como ellos, se interesa por sus costumbres, en definitiva, se empapa de la vida real del lugar al que llegó.

Pues para los viajes en el tiempo yo también prefiero ser turista, que además cualquier interacción puede cambiar la historia y eso sería muy malo que ya nos lo han contado muchas veces. Pero es que no es lo mismo observar desde la barrera la época de los dinosaurios que convivir con ellos una temporadita y buscarte la vida para comer un mamut. No es lo mismo escuchar de primera mano un soneto de Lope de Vega que correr el riesgo de ser retado a una lucha a espada por mirar demasiado el escote de la bodeguera. Riesgos e incomodidades las justas.

¿Y a qué viene todo esto si de lo que hay que hablar es de lo que se estrena esta semana? Pues a que debido el nivel, el de vuestros guses de la semana y el de los estrenos de hoy, el desequilibrio es muy evidente. Pero claro, vosotros estáis viajando en el tiempo, os habéis ido a la época dorada del cine, donde abundaba el talento y las buenas historias. Pero amigos los tiempos han cambiado mucho. Pensemos como se habrían acogido los estrenos de esta semana en aquellos 50 y la respuesta que podría provocar en aquella sociedad. Es bien cierto que la mayoría no sólo no se hubiesen estrenado sino que jamás se habrían realizado, pero hagamos un ejercicio de imaginación.

Empecemos con una comedia nipona. VERANO DE UNA FAMILIA DE TOKIO es la secuela de “Maravillosa familia de Tokio”, una comedia que debió hacer mucha gracia a 4 personas hace un par de años. La película nos cuenta la historia del abuelo de la familia que aprovechando un viaje de su mujer se junta con unos amigotes y tiene un accidente de coche, por ello todos los hijos se reúnen con la intención de que el abuelo no vuelva a conducir nunca porque está mayor y es muy arriesgado.

En los años 50 no se hubiera entendido nada. Los mayores, como en el mundo de los gitanos, eran intocables y si el abuelo conducía, montaba a caballo o controlaba una plantación de algodón, nadie rechistaba.

El documental de la semana es alemán y se llama MAREA HUMANA. Trata sobre la crisis global de los refugiados en el mundo. 

En los años 50 ya había algo de eso, judíos europeos en un barco intentando llegar a la tierra prometida y echar de allí a los habitantes. Algunos palestinos que tuvieron que dejar sus hogares para que llegaran otros a crear un nuevo país…Bah, poca cosa y pensaban que se resolvería en breve tiempo…¿Millones de personas y pobres?...¿Pero eso como iba a ser? ¿Y en el mundo occidental? Imposible.

Tenemos también JUEGO DE LADRONES, la peli americana de la semana. Trata del plan elaborado por un grupo de expertos ladrones para robar los 120 millones de dólares en efectivo que cada día la Reserva Federal de Los Ángeles retira de la circulación. Una brigada de policía del Departamento del sheriff intentará evitar el gran atraco.

En los años 50 la cosa estaba fácil. Si los ladrones estaban liderados por John Wayne es que había motivos justificadísimos para cometer el atraco y se saldrían con la suya, si el Duque estaba del lado de los polis, mala suerte para los atracadores, aunque tuvieran todo a favor al final habría un duelo y Wayne dispararía más rápido. En el caso de que la banda fuera liderada por Frank Sinatra no conseguirían su objetivo, pero se lo pasarían muy bien mientras lo preparan y lo ejecutan y se ligarían a unas cuantas chicas bonitas, yéndose finalmente de rositas.

También hay una de dibus, una película china titulada HAVE A NICE DAY que nos cuenta la historia de un simple conductor que le roba una bolsa con un millón de yuanes a su jefe para pagar una cirugía plástica a su novia, la noticia corre como la pólvora y todo el mundo le busca por la ciudad, a él y sobre todo al dinero.

En los 50 dirían: Dadle ese argumento a John Ford o a Howard Hawks o incluso a Delmer Davies o Anthony Mann y os harán un western en condiciones, ¿Qué tontuna es esa de dibujos animados que ni siquiera son para niños?

También tenemos la española RESORT PARAISO, una peli de terror que nos narra como una pareja que lo ha perdido todo (casa, dinero, trabajo) decide refugiarse temporalmente en el hotel donde ella trabajaba y que está cerrado en invierno. La cuestión es que les descubre un vigilante de seguridad y quiere divertirse a su costa, lo peligroso es que los que no tienen nada que perder, solo pueden ganar.

En los 50 la cuestión sería más clara, el malo no tendría escrúpulos ni remordimientos, los buenos (la pareja) se vería obligada a actuar por dignidad y cuando hubieran llegado al límite y responderían de manera proporcionada. Eso era lo que se llevaba entonces sin que fuera un lema de lo políticamente correcto. Es posible que tuvieran que cargarse al malo, pero sería cosa de defensa propia…me temo que no irán por ahí los tiros de esta película.

La peli francesa de la semana (sigo alucinando con la distribución española del cine francés) es UN SOL INTERIOR a mayor gloria de la bella Juliette Binoche que encarna a una artista parisina divorciada que busca el “amor de verdad” a través de varias relaciones distintas.

En los 50 no hubiera pasado la censura. Una mujer autosuficiente, puede. Una mujer que tiene varias relaciones, quizá. Una mujer que no es “castigada” por su promiscuidad, impensable.

Española también es la última película de Javier Fesser, CAMPEONES. El gran Javier Gutierrez protagoniza este film el que interpreta al segundo entrenador de un equipo de baloncesto de la ACB que pasa por problemas de pareja y laborales. Un día tras una borrachera tiene un accidente de coche y la juez le condena a entrenar un equipo de discapacitados intelectuales. Sin pareja y sin trabajo comprenderá junto a sus nuevos jugadores cuales son las cosas importantes de la vida. No sé si Javier Fesser ha controlado las gracias, supongo que si porque si no le lincharían a la voz de ya. El problema de esta película es que tienes que ajustar mucho el humor gamberro y reírte del “normal” termina resultando demasiado blando.

En los 50 no se diría discapacitados intelectuales sino subnormales, pero difícilmente harían risas con ellos, lo normal sería ocultarlos o ponerse tiernos. En cualquier caso ante una historia así tenemos claro que el equipo imposible logrará una hazaña y terminará midiéndose con un superequipo al que al final vencerán por una canasta agónica del peor jugador del equipo. Eso al menos es lo que ocurriría en los 50…y en los 60, en los 70, en los 80…

Otra peli americana nos la regala en esta ocasión Wim Wenders, el mítico director alemán que aboga con que no se pueden soltar sermones desde la gran pantalla y reafirma que lo del cine es pura imagen y que la palabra es para otro tipo de formatos. Imagino que algún director mítico de los 50 pondría reparos a semejante afirmación, pero no hay viajes en el tiempo para saber si dirían otra cosa. El caso es que llena de silencios nos cuenta en INMERSION una historia de amor, la de un espía británico y una bio-matemática que se conocen casualmente en un hotel de Normandia. Cuando se separan, él parte para Somalia en la búsqueda de una cedula yihadista de terroristas suicidas y es secuestrado. Ella, sin embargo, en busca del origen de la vida se adentra en lo más profundo del océano a bordo de un sumergible sin saber si el amor de su vida está vivo o muerto.

En los años 50….habrían alucinado. ¿De qué lo cual? ¿Estamos a setas o a rolex? O luchamos contra los malos o investigamos el océano pero no mezclemos. Y vale, hay una mujer que se enamora del prota, incluso es correspondida, pero él está a lo que tiene que estar…ya cuando vuelva se besan y listo, ella le espera en casa pacientemente que él tiene que resolver el tema de los terroristas y sumergirse en busca de la fuente de la vida y luchar contra un pulpo gigante, ella mientras que se entretenga zurciendo calcetines.

Con todo y visto lo visto, concedamos al alemán el beneficio de la duda, no en vano es el más talentoso de los que aparecen en la cartelera y su trayectoria es un grado. Por eso le vamos a regalar el galardón de APUESTA DE LA SEMANA.

Y eso es to, eso es to, eso es todo amigos que decía Porky en las despedidas de aquellas series de dibujos de Hannah Barbera. Todo o casi todo porque nos falta poner un interludio musical y vosotros lleváis toda la semana trayendo leyendas, leyendas de otro tiempo…Este también lo es.

LA LEYENDA DEL TIEMPO (Camarón de la Isla)

El sueño va sobre el tiempo 
Flotando como un velero 
Nadie puede abrir semillas 
En el corazón del sueño 

El tiempo va sobre el sueño 
Hundido hasta los cabellos 
Ayer y mañana comen 
Oscuras flores de duelo 

El sueño va sobre el tiempo 
Flotando como un velero 
Nadie puede abrir semillas 
En el corazón del sueño 

Sobre la misma columna 
Abrazados sueño y tiempo 
Cruza el gemido del niño 
La lengua rota del viejo 

El sueño va sobre el tiempo 
Flotando como un velero 
Nadie puede abrir semillas 
En el corazón del sueño 

 Y si el sueño finge muros 

En la llanura del tiempo 
El tiempo le hace creer 
Que nace en aquel momento 

El sueño va sobre el tiempo 
Flotando como un velero 
Nadie puede abrir semillas 
En el corazón del sueño 

El sueño va sobre el tiempo 
Flotando como un velero 
Nadie puede abrir semillas 
En el corazón del sueño



Y si yo pudiera viajar en el tiempo aun no tengo claro a qué época preferiría ir, pero lo que si tengo claro es que me gustaría ir montado en un Delorean. Ese es nuestro MOSAICO DE HOY





Comentarios

César Bardés ha dicho que…
Pues yo voy a ir a por los "Campeones", que no es que me apetezca mucho, pero no hay mucho más donde elegir. Más aún después de que en el "Días de cine" de ayer dijeran que la de Wenders es un rollo del quince, que se pasa de grandilocuente para un mensajito de ná y menos. Es cierto que Wenders tiene grandes películas y durante los ochenta fue el gran gurú del "cine de orín". Ahí están películas como "El cielo sobre Berlín" o "París, Texas" para atestiguarlo (y no hace mucho volví a ver "París, Texas" y se me está quedando antigua, antigua...), luego ya vinieron truños históricos como "Hasta el fin del tiempo" o "Lisbon Story", con aquella obsesión suya de retratar una realidad que no puede ser retratada porque en el momento en que estás allí la alteras.
En cualquier caso, un repaso de altura para un nivel de cartelera bajo como la estatura de Javier Gutiérrez (que no dramática...que es de los mejores)
Abrazos desde lo alto del podio.
dexterzgz ha dicho que…
Jolines, vaya una mierda de sección, o sea no, que la sección está muy bien cocinada y aderezada pero jo, vaya estrenos. Yo fui uno de los que acompañó a los 4 a los que les hizo gracia la de la maravillosa familia de Tokio esa (la primera no, que estaba bien de hecho), vamos humor amarillo y además bastante casposillo para el que haya tenido la suerte de no sufrir esto (el prota es una especie de Paco Martínez Soria nipón pero encima sin las dotes cómicas del maestro aragonés).

A Wim Wenders, pues sí, al pobre ya le dijeron de todo cuando estrenó la película en la inaguración del último Donosti. Así que esta semana huérfanos de cine, suerte que sigue pendiente tito Steven.

Abrazos readys
Anónimo ha dicho que…
Me encanta Burque todo lo que hace y lo que dice como si estuviese de vuelta de todo.

Yo iré a ver campeones supongo que será una peli de emocionarse y de eso es de lo que se trata.

Una ful de estrenos, la verdad, pero un gran y divertidos Gus, gracias, Car.

Besos insulsos

Altanta
Anónimo ha dicho que…
Ay el cine de los 50'...cuánto se le echa de menos. Al menos yo. Creo que la mejor opción debe ser Campeones, que además la infanta Elena ha dicho que todo el mundo a ver esa peli (para no mojarse con el temita de la lucha de reinas), a la salida del cine.

Besos

low
INDI ha dicho que…
muy buen gus, Carpet, siempre sabes darle la vuelta a la tortilla. No me llama mucho la de Campeones, a lo mejor una visita a Juliette Binoche. Quizás ni eso.

Me encanta el mosaico de Regreso al futuro, una de ésas trilogías que marcaron nuestra juventud. La primera y la tercera son geniales, en la segunda creo que se les fue un poco la mano con tanto salto en el tiempo y se lía demasiado la trama. Pero excelente trilogía, sin duda.

Abrazos desde el Delorean

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