GUS MORNINS 7-10-19


“No me retiraré mientras siga manteniendo mis piernas y mi caja de maquillaje”. (Bette Davis)

Guuud mornins, cinéfilos.

Caray, qué gusto da volver a repetir estas tres palabras mágicas y daros la bienvenida a una mañana de lunes. Tampoco ha sido tan difícil ahora que lo pienso. Aquí estamos de nuevo, cuando octubre ya ha echado a andar y el fresquito hace que algunos salgamos ya de la madriguera. Que en plenos pilares ya parece que el eterno verano se nos va despegando y el cierzo viene a sumarse a la fiesta. Este lunes no va a haber capítulo de “El cine en cien películas”, pero el próximo sí, el número 60 ya de la sección.

Y si allá por el mes de julio me despedía de vosotros con un grande, Buster Keaton (os recomiendo el documental de Bogdanovich que es mucho más sabio y dice menos tonterías de las que se pudieron leer por aquí) hoy os saludo con una grande. Una de las más grandes, tampoco vamos a entrar en consideraciones que con esto de las divas ya se sabe. Porque ayer, justo ayer se cumplieron treinta años desde que nos dejara la inigualable Bette Davis.

Ruth Elizabeth Davis nació en Lowell, Massachussets el 5 de abril de 1908 en el seno de una familia de clase media y padres divorciados. Su primera vocación fue el teatro y se formó en la hn Murray Anderson’s Acting Dramatic School de Broadway, pero ya muy jovencita se traslada a Hollywood donde comienza a trabajar primero con la Universal y luego con la Warner. Con estos segundos estudios comenzaría a forjar su leyenda a base de papeles de mujeres fuertes, inquebrantables, con su puntín de arrogancia y cinismo. El prototipo de mujer fuerte que encarnaba la Davis era muy diferente del que representaba Katharine Hepburn que resultaba mucho menos antipático para el espectador.

Las dos grandes divas de la época pugnaron por el papel de Scarlett O´Hara en Lo que el viento se llevó. Al parecer, Bette resultó ser la gran favorita del público en una encuesta radiofónica celebrada antes de saberse que la elegida final de David O Selznick seria Vivian Leigh. Después, el productor se pillaría un rebote importarte al enterarse de que la Davis interpretaría Jezabel, el melodrama sureño creado por la Warner.

La película fue la primera de las tres grandes colaboraciones entre el director Willam Wyler y la actriz (las otras serían La carta,1940 y La loba 1941). El papel le valió a esta el segundo y último Oscar de su carrera. El primero lo había conseguido tres años antes haciendo de mala, mala mala en una peli cuyo título lo dice todo, Peligrosa.

Davis fue la primera actriz en conseguir diez nominaciones a la dorada estatuilla (atesoraría once finalmente) y también la primera mujer en presidir la Academia de Hollywood. Por supuesto es un trocito de la historia del cine, y por tanto también de nuestras vidas. Con un rosario de títulos -abróchense los cinturones- increíble: Cautivo del deseo, Peligrosa, El bosque petrificado, La mujer marcada, Jezabel, Amarga victoria, La carta, La loba, La extraña pasajera, Eva al desnudo, Un gánster para un milagro, Qué fue de Baby Jane, Su propia víctima, Canción de cuna para un cadáver, A merced del odio, Muerte en el Nilo, Las ballenas de agosto… Y tantos y tantos hasta un total de casi ciento veinte.

Bette se nos fue el 6 de octubre de 1989 en París, días después de recibir uno de los primeros premios Donostia y de protagonizar una histórica y divertida rueda de prensa a orillas del Urumea. Eran los tiempos en los que aún se estilaba lo de la maldición del Donostia, actor o actriz que lo recibía, actor o actriz que la palmaba a las pocas semanas. Eran otros tiempos. Bette fue una actriz, sin tiempo, sin edad, inmortal.

Por supuesto, el mosaico y la canción de hoy no podrían estar más cantados y estar dedicados a ella y al secreto de sus ojos.

BETTE DAVIS EYES
Kim Carnes

Her hair is Harlow gold
Her lips are sweet surprise
Her hands are never cold
She's got Bette Davis eyes
She'll turn the music on you
You won't have to think twice
She's pure as New York snow
She got Bette Davis eyes
And she'll tease you, she'll unease you
All the better just to please you
She's precocious, and she knows just what it
Takes to make a pro blush
She got Greta Garbo's standoff sighs, she's got Bette Davis eyes
She'll let you take her home
It whets her appetite
She'll lay you on the throne
She got Bette Davis eyes
She'll take a tumble on you
Roll you like you were dice
Until you come out blue
She's got Bette Davis eyes
She'll expose you, when she snows you
Off your feet with the crumbs, she throws you
She's ferocious and she knows just what it
Takes to make a pro blush
All the boys think she's a spy, she's got Bette Davis eyes
And she'll tease you, she'll unease you
All the better just to please you
She's precocious, and she knows just what it
Takes to make a pro blush
All the boys think she's a spy, she's got Bette Davis eyes
She'll tease you
She'll unease you
Just to please you
She's got Bette Davis eyes
She'll expose you
When she snows you
She knows you, she's got Bette Davis Eyes


LOS OJOS DE BETTE DAVIS
Kim Carnes
Su pelo es de oro como el de Jean Harlow
sus labios una dulce sorpresa,
sus manos nunca están frías,
tiene los ojos de Bette Davis.
Ella volverá la música contra ti,
no tendrás que pensarlo dos veces.
Es pura como la nieve de Nueva York,
tiene los ojos de Bette Davis.
Y te tentará,
te incomodará,
todo lo mejor, solo por complacerte.
Ella es precoz,
y sabe cómo hacer que un profesional se ruborice.
Tiene los suspiros de exasperación de Greta Garbo,
tiene los ojos de Bette Davis.
Te dejará que la lleves a casa,
hace que le entre hambre.
Te pondrá en el trono,
tiene los ojos de Bette Davis.
Se desplomará sobre ti,
te hará rodar como si fueras un dado,
hasta que acabes deprimido,
tiene los ojos de Bette Davis.
Te dejará al descubierto,
cuando te hunda en la miseria.
Espero que estés satisfecho con las migajas que te tira.
Ella es feroz,
y sabe cómo hacer que un profesional se ruborice.
Todos los chicos creen que es una espía,
tiene los ojos de Bette Davis.
Y te tentará,
te incomodará,
todo lo mejor, solo por complacerte.
Ella es precoz,
y sabe cómo hacer que un profesional se ruborice.
Todos los chicos creen que es una espía,
tiene los ojos de Bette Davis.
Te tentará,
te incomodará,
solo por complacerte,
tiene los ojos de Bette Davis.
Te dejará al descubierto, cuando te hunda en la miseria,
te conoce, tiene los ojos de Bette Davis.




EL MOSAICO DE HOY



Comentarios

carpet_wally@gmail.com ha dicho que…
Buenos días también por mi parte...

Siento mi silencio y mis ausencias (creo que aun se prolongarán un poco, quizá todo este mes) pero os sigo leyendo a destiempo y con prisa (también el blog del Lobo). Es lo que hay, la actualidad manda, dicen los periodistas, y en mi caso lo que manda es estar metido en el trabajo hasta las cejas con poco margen para el placer. Y ya os he dicho muchas veces que para mi es un placer leeros y comentar lo que escribís...Espero que esta racha pase pronto y reunirme con vosotros otra vez de manera habitual.

Me encantaría haber hablado de Bruce, de Irons, de Matthau o del viejo Jack. También de la Davis (Bette, no de la Copa de tenis)...os la debo...y como alcalde vuestro que soy...

Abrazos y besos y cariños y de tó.

INDI ha dicho que…
vaya, a éso se le llama volver a lo grande. Porque grande es y será siempre Bette Davis y grande eres tú, Dex. En la historia del cine ha quedado la rivalidad Hepburn - Davis, pero si hay que elegir... me quedo con las dos.

Efectivamente fue hilarante la rueda de prensa de Bette cuando le concedieron el Premio Donostia, así como el acto de entrega del premio. Fue una diva y se fue como una diva, la fantástica Bette Davis.

Un placer volver a leerte los lunes, Dex. Me alegro un montón, tanto como cuando Albanta decida también reincorporarse.

Abrazos de lunes, hoy menos lunes
César Bardés ha dicho que…
Bienvenido a las líneas, maño. Y nada menos que de la mano de Bette Davis, una de las más grandes actrices del cine. Es cierto que era una mujer con un carácter un tanto difícil (aunque muchas veces sus arranques tenían un algo de razón), pero no cabe duda de que fue una actriz de muchísimos recursos, espectacular, con algunos momentos inigualables por nadie. Siempre recordaré esa escena, que parece un "grand guignol" en "¿Qué fue de Baby Jane?" en la que está debajo de una luz cenital, de una lámpara que ilumina directamente su cara pero deja en sombras sus ojos y sus arrugas, y comienza a burlarse de la admiración que despierta su hermana. Eso es actuar y lo demás son tonterías.
Gran gus y gran actriz. No se puede pedir más.
Abrazos con los ojos.
Anónimo ha dicho que…
Qué buena rentreé, maño con una de las más grandes actrices que nos ha regalado el cine. Aprendí a amar el cine de la mano de mi madre, ya os lo he contado alguna vez, y la Davis era, y es, una de sus actrices preferidas. La de veces que habré visto Jezabel, a mis madre le encanta esta peli y La loba, La carta y sobre todo, La extraña pasajera. La verdad es que me gustan todas sus pelis.
Recuerdo esa entrega del premio Donostia...qué momentáneo.

Besos de bienvenida
low
Anónimo ha dicho que…
Momentáneo no...momentázo. Nunca entenderé por qué coño estas teclas escriben solas lo que les da la gana...

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