GUS MORNINS, 27/03/20
Soy
grande Son las películas las que se han hecho pequeñas
(El crepúsculo
de los dioses, Billy Wilder, 1950)
Guuuus
mornins, cinéfilos
Viernes,
ya por fin viernes, aunque a estas alturas a quién le puede importar eso.
Recuerdo cuando el viernes era una palabra mágica que la nombrabas y se abrían
las puertas del fin de semana. Ahora pues no sé, es todo un poco raro. Los
viernes solían ser antaño – hablamos como si esto hubiera ocurrido hace un
siglo- llegaban a la cartelera los estrenos, y en el gus teníamos sección y
todo para recomendarlos ¿Os acordáis?
Bueno,
no hay mal que por bien no venga, en estas semanas de confinamiento me he
propuesto recuperar esa sana costumbre que abandonó nuestro Dj suplente,
cargado de trabajo hasta las cejas, no las de Scorsese sino las suyas propias.
Ello impidió que en los últimos tiempos no tuviésemos como apuestas de la
semana los últimos films del propio Marty, Woody Allen, Tarantino o el
documental de Sergio Ramos por poner algunos ejemplos.
Pero
como digo, aquí estoy yo para recuperar las tradiciones y recomendaros los estr… ah, calla, es verdad
que los cines están cerrados. No importa, no importa, como dijo el otro día no
sé quien muy pedante queda mucho cine por ver y por repasar. Así que en estos
viernes de cuarentena nos dedicaremos a eso, a recomendar cine para ver y para
repasar desde casa, algunas de las películas que podríais ver uno de estos días
para matar el rato. Serán cuatro propuestas más un bonus track apuesta de la
semana. Y como hilo conductor para las recomendaciones usaremos las efemérides
del día.
Así
por ejemplo, tal día como hoy, pero de 1899 nacía Gloria Swanson, la famosa
actriz norteamericana del cine mudo, con lo que nuestra primera recomendación a
mayor gloria de Gloria será La reina
Kelly (Erich Von Stroheim, 1929), todo un clásico del cine mudo en la
época en la que se resistía a sucumbir ante el sonoro. Este elegante melodrama
transcurre en un reino europeo llamado Kromberg en el que vive una caprichosa
reina Regina V. La soberana hace y
deshace como le da real gana y en uno de sus arrebatos manda a su primo y su
prometido, el príncipe Wolfram, de maniobras por haberse ido de juerga la noche
anterior. El caso es que durante su castigo el príncipe conocerá a una joven de
la que se enamora perdidamente y a la que decide raptar poniendo en peligro su
inminente boda con Regina. Fue uno de
los últimos films de Stroheim que se retiraría de la dirección tan solo cinco
años más tarde. Swanson por su parte fue la gran estrella del cine silente ya
en su ocaso, aunque llegó a tiempo para trabajar con los más grandes como Cecil
B De Mille. Durante el rodaje, Erich y Gloria tuvieron sus más y sus menos, y
la peli obtuvo un estrepitoso fracaso comercial. Como curiosidad, en El crepúsculo de los dioses de Billy
Wilder se incluyen varios guiños a esta obra; por ejemplo, La reina Kelly
es la película que ven Joe Gills y Norma Desmond en la escena que reproducimos
en nuestro mosaico.
Hoy,
también es el cumpleaños (77) del británico Michael York. Vale, que siempre fue
un actor limitado, pero también siempre será el chico de Cabaret, y eso sí que son palabras mayores. Lo cierto es que
Michael era resultón y dio la talla en películas como La fuga de Logan, Fedora –
otra vez tío Billy- y la saga de los mosqueteros de Richard Lester. Pero hoy le
recomendamos en la adaptación del clásico de doña Agatha Asesinato
en el Orient Express (Sidney Lumet, 1974) que protagonizó junto a una
pléyade de estrellas entre las que estaban Lauren Bacall o Richard Widmarck.
Albert Finney interpretaba con su probada elegancia al detective Hércules
Poirot, e Ingrid Bergman se llevó a casa su tercer Oscar, en este caso como
actriz secundaria por un papel que volvería a encarnar Penélope Cruz (olé,
morena) en la versión reciente de Kenneth Branagh. Porque, claro, revisar este
clásico nos servirá entre otras cosas para quitarnos el regusto que nos dejó el
nefasto remake del ex de Emma Thompson.
Otro
cumpleañero que se pasa por aquí es Mr Quentin Tarantino que hoy llega a la
respetable edad de 57, aunque no creo que le importe mucho, que el tío acaba de
ser papá. Para celebrarlo, el cumple y la paternidad, podemos vernos esta tarde
Érase una vez … en Hollywood, su última película
que ya está disponible en Vod para todos nosotros. Fue una de las grandes
películas del pasado 2019 – quizá cuando pase un tiempo recordaremos este
título por encima de parásitos, irlandeses, o payasos pyscokillers. Cuando todos
creíamos que la estrella del genio de Knoxville se estaba apagando, tras Django
desencadenado y sobre todo tras Los odiosos ocho, el geniecillo de Knoxville va
y se nos descuelga con esto, toda una carta de amor al cine- y a la tele-, la
perfecta recreación de una época y de un modo tanto de vivir como de hacer las
películas, y un ejercicio de justicia poética al más puro estilo Malditos
Bastardos. ¿Qué más se puede pedir? Ah, pues, ya que estamos, por si fuera poco también contamos unas geniales interpretaciones de
Leo y Brad que además despliegan una excelente química entre ellos.
Hoy
es también el Día Mundial del Teatro, pero será un día raro porque no habrá
salas abiertas, ni espectadores, ni aplausos, ni titiriteros en la calle que
reivindiquen esta ahora denostada profesión. Yo creo que algo inventarán,
aunque la magia del escenario no se puede reemplazar y menos por una sesión de
Skype. Aun así, siempre nos quedará el cine, y el llamado “teatro filmado”de directores
especialistas en la materia como Mankiewicz u Orson Welles. Hoy os querría
recomendar Vania en la calle 42
( 1994), la última película del genial Luisito Malle. Como testamento
cinematográfico no está mal, y como homenaje al arte de Talía pues la verdad
que tampoco. La película sigue a un grupo de actores que ultiman sus ensayos
sobre la obra de Chejov; la realidad se mezclará con la ficción y las relaciones entre los intérpretes se
acaban confundiendo con las de los personajes de la pieza. Una película fascinante,
sincera y original
Y
como hemos empezado con Gloria vamos a terminar también con ella. Ya dijimos
que en El crepúsculo de los dioses se incluían muchos guiños a nuestra primera
recomendación de hoy. Y da la casualidad de que hoy se cumplen 18 años del
fallecimiento de Billy Wilder. Blanco y en botella, aunque tratándose de Wilder
cualquiera de sus títulos vale para hacerle un homenaje (hasta El valls del emperador, ya puestos). Tío
Billy eligió un Viernes Santo para morirse, debe ser cosa de los Dioses que se
permiten hasta fijar la fecha de su crepúsculo. En la película que hemos escogido
hoy como particular APUESTA DE LA SEMANA, Wilder homenajea a la figura del
guionista a través de una deslumbrante historia con toques de cine negro. Hemos
hablado cientos de veces de esta película en el gus, pero por una más no pasa
nada. William Holden es Joe Gills, un escritor de segunda fila que cae en las
manos de Norma Desmond, una vieja gloria de Hollywood que le utiliza para
intentar volver al estrellato. El film es un tributo también a los tiempos
dorados de la Meca del Cine, y por allí desfilan Cecil B. De Mille, Buster
Keaton o el propio Stroheim, interpretando al fiel mayordomo de la Desmond.
Maravilla de las maravillas, esta película nunca se quedará pequeña. Hoy nos
despedimos con el maravilloso número que interpretó Glenn Close en la
adaptación de Broadway. Nos vemos el lunes, mientras os deseo mucha paciencia y
mucho ánimo. El cine, como la casa de Norma Desmond, siempre será nuestro
refugio.
Comentarios
Y es esa sobrecarga laboral, no la desidia, la que me ha impedido comentar vuestros grandes gus. Lo primero agradecer que sigáis ahí, heroicamente, alimentando nuestra fe cinéfila inasequibles al desaliento.
Y uan buena propuesta la de esta semna, repasar "Ordet", la filmo de la Massina y la Signoret, a Sir Elton y las recomendaciones clásicas del maño para el finde.
Sois los mejores...si encontrase algo más de tiempo hasta me haría un transversal sobre aislamientos (en El país digital viene hoy uno de balcones de cine que tampoco he podido leer).
Abrazos muy muy agradecidos.
Muchos besos para todos.
low
En cuanto a las demás recomendaciones, qué decir. Yo me he apretado ya un ciclo de Hitchcock y ahora estoy con Mankiewicz. Me están esperando Huston y Wilder. En ocasiones así, siempre regreso a ellos porque me dan esperanza con sus genialidades.
Como el gus con este gus de reposiciones (¿os acordáis cuando había esa sana costumbre?).
Abrazos crepusculares.