GUS MORNINS, 21/04/22
Como alcalde vuestro que soy, os debo una explicación, y esa explicación que os debo, os la voy a pagar
(Bienvenido Mr. Marshall, 1953).
Guuus mornins, cinéfilos.
Yo no soy vuestro alcalde, ni siquiera he participado en ningún pelotazo ni reparto de comisiones multimillonarias, lo juro, que me registren, pero en virtud de la potestad que me da el haber estado tantos años al frente de esta nave, creo que sí, merecéis una explicación. No sé a qué tanto, pero estos días se ha montado una buena con lo de mi penúltima espantá al frente del gus. Me han llegado por tierra, mar y aire peticiones de que dé la cara, que no sé si tengo mucha o poca, por parte de los trillones. Y bueno aquí para no escurrir el bulto, cual Rubiales, o rubiales que fui.
El caso es que sí, que como dice aquí nuestra querida doctora Lowenstein ya nadie somos lo que éramos. Fíjate, tú, misma, ya eres abuela. Enhorabuena, por cierto.
Y en cuanto a mí, qué deciros. Os agradezco en primer lugar las muestras de agradecimiento y de amor, incluso (no sois mi tipo, la verdad), y los elogios (¿saber estar yo?, a los hechos me remito). En segundo lugar, no sé de veras cómo explicaros esto que a lo mejor lo que pasa es inexplicable. Inexplicable el siroco que me dio hace unos días publicando una entrada aquí pensando que igual, oye... Inexplicable - e impresentable lo admito también- la decisión de borrar todo como si fuese Jim Carrey en "Eternal Sunshine of Spotless Mind (me niego a reconocer el título en castellano). Y una cosa y otra nos ha llevado hasta aquí.
Deje el gus hace un par de años - ha pasado menos tiempo del que creía- porque me creaba una dependencia malsana y de repente me vi convertido en una especie de exfumador, porque me había vuelto previsible, porque sentía que no tenía nada que contar ya, que me desnudaba demasiado - justo lo que estoy haciendo ahora- sometido a una sobreexposición que ya no toleraba, porque estaba en una edad mu mala que me impedía además hacer otras cosas además de esta. Porque no me veía haciendo el gus con ochenta... vamos que estaba muy depre.
Y ahora tampoco estoy mucho mejor - tampoco mucho peor a ver no os penséis- pero pensé que probando a colgar algo, pues oye igual... Pero la conclusión es que no fue tan buena idea. Por poner algo de cine "Elegí un mal día para abrir el gus".
Sólo me queda agradecer las muestras de agradecimiento y de amor (no insistáis, coñe, que ya os lo he dicho), en especial al Lobo Bardés. Gracias por seguir manejando el timón como lo haces, siento no haber estado ahí en más ocasiones. Tú si que sabes, tu prosa y tus conocimientos sí que nos deslumbran, y pienso que en el fondo tampoco te cuesta tanto esfuerzo. A fin de cuentas, son tus armas y es tu profesión. Por poner algo de cine: "Todos somos contingentes, pero tú eres necesario".
Y eso es todo lo que tenía que deciros. O no, porque la verdad que ha costado sacar los trapos sucios ante la audiencia (la Nacional no, que ya os digo que no tengo nada que ver con pelotazos ni con operaciones de comisiones, me refiero a la vuestra). Y es que a veces, como dijo el amigo, decir lo siento es lo más difícil.
Gracias a todos. Fue un placer. Nos vemos por ahí.
Comentarios
Comprendo las depres y los arrebatos, ahora me voy, ahora vuelvo, ¿debo irme de nuevo? ¿Debo volver a volverme?. ¿Soy o no soy? ¿Estoy o no?. Si a Hamñlet se le piraba la olla, que no va a suceder en Zaragoza, aunque no huela a podrido allí.
Yo comprendo también que lo de obligarse a escribir a diario cuitas aunque sea con escusa cinematográfica a aquellos que no somos profesionales de esto resulta un tanto estresante (yo lo hacía una vez a la semana y me costaba horrores). Bardés tiene una capacidad fuera de serie y así es capaz de levantar su telón con eficacia y sensibilidad para goce de todos los que le leemos.
Para los menos dotados (y no incluyo a Dex en ese grupo porque si quisiera podría dedicarse más profesionalmente a eso de ver y decir sobre cine y sobre más cosas) intentar juntar unas letras para decir unas cuantas cosas que se nos ocurran nos lleva un mundo y es un esfuerzo de mucho desgaste. Entiendo por tanto que el maño haya sufrido su tensión en silencio sin un hemoal emocional que aliviase sus males.
En realidad, lo de escribir para mi sería tabla de salvación para muchas de mis cuitas cotidianas y así, he intentado cuando he podido relajar mis tensiones soltando palabrejos con ayuda de mi teclado (relatos, poemitas, guses, chistecillos, gracias, reflexiones poco profundas, profundidades inextricables, paradójicos autoanálisis...)
El tiempo sin embargo ahora es mas corto o lo tengo mucho más ocupado ( es lo segundo, lo sé) y no puedo evadir mis males como antes, leer (leeros) es una forma de hacerlo tambien.
No es probable que estemos hasta los 80 publicando en el gus, quizá la ciencia avance y lo hagamos de otra forma), pero si espero que lleguemos a esas edades manteniendo el contacto, la frescura y la amistad ( lo de la belleza lo doy por descontado), hay una nueva abuela que quita el hipo allá en Valencia.
Abrazos que absuelven de los pecados.
Abrazos sinceros