GUS MORNINS 23/3/21

 "En todas mis películas hay tres o cuatro minutos de cine de verdad"

                                                                                                    Akira Kurosawa


Aunque ya hemos hablado unas cuantas veces sobre él, hoy es ineludible dedicar unas líneas al gran maestro del cine japonés y a uno de los más grandes de todo el mundo. Es su cumpleaños y hubiera soplado 111 velas. Por supuesto, haremos un repaso a su vida a través de las anécdotas porque, si no, no os voy a descubrir nada nuevo.

Fue un hombre que pasó por muchas crisis personales. La más grave de todas ellas fue en 1971, una vez ya despedido del rodaje de Tora, Tora, Tora y convencido de que no valía para nada e intentó suicidarse tratando de rebanarse el cuello. Lo intentó treinta veces y no lo consiguió.

Increíblemente, durante un período de su carrera (ese mismo que coincidió con su intento de suicidio) no encontraba financiación para sus películas. De ahí su convencimiento de que no valía para nada. Para salir adelante, dirigió anuncios para televisión.

Era un hombre extremadamente alto para ser de raza nipona. Aproximadamente sacaba una cabeza a todos los que le rodeaban.

Tuvo fama de que sus rodajes eran un infierno. Sin embargo, muchos de los actores con los que trabajó dicen que no era para tanto, que el adjetivo que mejor le iba era el de "intenso".

En una encuesta patrocinada por la revista Entertainment Weekly fue votado el sexto mejor director de todos los tiempos.

Profesaba una profunda admiración por John Ford. Lo conoció de joven y fue un encuentro bastante decepcionante porque ninguno de los dos se sintió cómodo. En los sesenta, intentaron un nuevo encuentro y ya fue bastante mejor. Ford le dijo: "Realmente, tú eres como la lluvia" a lo que Kurosawa respondió: "Ya veo que has visto mis películas".

Durante mucho tiempo expresó su deseo de hacer una película perteneciente a la serie de Godzilla. Sin embargo, los productores de la Toho, compañía para la que normalmente trabajaba, no veían la idea con buenos ojos porque consideraban que Kurosawa, haciendo una película normal, ya era bastante caro y se les ponían los ojos en blanco pensando en que hiciera una historia de monstruos.

Su propia familia decía que la mayor parte del tiempo sólo pensaba en el cine. Incluso en sus ratos libres parece ser que sólo pensaba en la planificación de momentos puntuales de la vida cotidiana.

Consideraba que una obra maestra como Kagemusha no fue más que un ensayo con vestuario para Ran, la película que realmente deseaba hacer durante dos décadas.

Era el hijo menor de cuatro. Sentía una enorme admiración por su hermano mayor, Heigo, que se dedicaba a poner voz y rótulos al cine mudo. Sin embargo, Heigo se suicidó. Sus otros hermanos (un chico y una chica) murieron de tisis. Akira se quedó como el único descendiente de la familia y decidió estudiar arte para compensar a sus padres y que estuvieran orgullosos de todos ellos.

Otro de sus directores favoritos era el indio Satyajit Ray.

Su película La fortaleza escondida es la principal fuente de inspiración en materia de personajes para La guerra de las galaxias. El General Rokurota Makabe sería el precedente de Obi-Wan Kenobi; la princesa Yuki sería, obviamente, la Princesa Leia; y los criados Matashishi y Tahei serían los trasuntos de C3PO y de R2D2.

Uno de sus mejores amigos fue el director japonés Ishiro Honda, creador de Godzilla en la famosa Japón bajo el terror del monstruo. En su juventud, mientras eran estudiantes, vivieron juntos y Kurosawa le estuvo tentando siempre para que le asistiera como ayudante de dirección, pero Honda quiso hacer carrera por sí mismo. Cuando el fenómeno Godzilla pasó de moda y Honda fue destinado a trabajos menores, Kurosawa no se lo pensó dos veces y le contrató como ayudante de dirección para todas sus películas a partir de Kagemusha. Cuando Honda falleció, Kurosawa le veló día y noche, pagó todos los gastos del entierro y pronunció un bonito panegírico por él.

Llegó a ser irritante con su perfeccionismo. En una toma, se dio cuenta de que no le gustaba el tejado de un edificio que salía dentro de campo y lo hizo cambiar. Por supuesto, eso disparó los gastos.

Consideraba que la mejor escuela que tuvo para hacer películas fueron sus años como asistente de dirección.

Investigando en su árbol genealógico, se puede encontrar que varios de sus antepasados fueron auténticos samurais. Parece ser que el factor de la altura en su familia fue muy evidente y eso les hacía físicamente imponentes para el oficio.

Ingmar Bergman le admiró profundamente.

Le gustaban muchísimo las películas del Oeste, especialmente las de John Ford.

Aunque, posiblemente, sea el mejor director japonés de todos los tiempos, no fue, ni mucho menos, el más popular en su país. Le consideraban "el más occidental de todos los directores japoneses", lo cual hizo que gran parte de la crítica y del público no le tuviera en mucho aprecio porque se dedicaba a retratar más la cultura occidental que la oriental.

Quedó impresionado con el ambiente que John Sturges había reflejado en Conspiración de silencio y quiso recrearlo para su película Yojimbo así que le pidió a Sturges que se desplazara a Japón para asesorarlo. Sturges aceptó la propuesta a cambio de que hiciera una rebaja en los derechos de Los siete samurais porque quería hacerla en clave de western con el título de Los siete magníficos que, en ese momento, era un proyecto en común de Sturges con Anthony Quinn. Sturges pasó en Japón diez días asesorando al equipo y al propio Kurosawa. Más tarde, Quinn se bajó del proyecto y se subió Yul Brynner. Cuando Kurosawa vio la película terminada quedó encantado con el remake y dijo: "Nunca pensé que mi película pudiera ser un western tan bueno...y con esa música"

Es uno de los más grandes directores de la historia. Aquí un breve estudio sobre sus movimientos y composiciones de planos. Hay algunos realmente sorprendentes y está subtitulado en inglés. Se entiende bastante bien.

Com mosaico os dejó a Akira Kurosawa junto a Francis Ford Coppola y George Lucas, los únicos que se atrevieron a producirle cuando nadie quería dejar dinero al maestro para rodar. De ahí nació Kagemusha y la fotografía pertenece al rodaje.



Comentarios

carpet_wally@gmail.com ha dicho que…
Pues efectivamente poco más se puede decir de alguien tan grande, aunque es admirable que aun encuentres cosas que contar de él y aun sigan sorprendiéndonos e interesándonos.

A mi me fascina Kurosawa como sabéis y está claro que probablemente no esté en mi top 6 sino en mi top 5 o incluso 3, de directores. Y algunas de sus películas, "Ran" o "Los siete samurais", son de mis preferidas de todos los tiempos. A la segunda le dedicó Dex un magnífico post en su sección "El cine en 100 películas", quizá haya algún momento para que nos regale un post de la primera.

Por cierto, hace poco reví "Dersu Uzala" y me volvió a a parecer espectacular incluso con ese ritmo tan quieto y tan nipón, no sé por qué la recordaba más rápida. Entiendo que ahora la gente joven no aprecie esa forma de contar, pero la película es maravillosa.

Muchas gracias por el post ypor el recuerdo a Akirael grande, incluso de tamaño.

Y vuelvo a pedir disculpas por mi ausencia el viernes pasado, no sólo fue el festivo, es que el lio laboral me impidió sacar tiempo al tiempo.

Abrazos con grandes lluvias kurosawianas

Entradas populares de este blog

Guuud mornins, 14/05/13

EL CINE EN CIEN PELÍCULAS (XLVIII)

EL CINE EN CIEN PELÍCULAS (LXV)